Hace poco días hemos asistido a la culminación del pago político a lo titiriteros de la guerra de Irak. Zapatero ha cumplido con ellos. Les ha pagado sus servicios prestados. Ha apoyado el canon digital que supondrá una aportación para este colectivo mediático de más de 100 millones de euros anuales. ¿Cómo no van a manifestarse cada vez que Zapa toque a arrebato? Faltaría más.
Desde el Partido Popular estamos a favor de proteger a los creadores, pero no aceptamos de ninguna manera que haya que pagar un canon por adquirir material tecnológico, y que considere a las personas como sospechosas de hacer cosas que no permite la ley. El mantenimiento de este impuesto supone un freno al desarrollo de las nuevas tecnologías y una agresión directa al bolsillo de los españoles, entendiendo que, además, supone una medida regresiva y anticuada.
Para sacar adelante su mantenimiento y ampliación, los socialistas de Zapatero tuvieron que echar mano, una vez más, con algún grupo que estuviera dispuesto a poner precio a su apoyo. Lo encontraron en los catalanes de CIU, demostrando quienes ven en el progreso tecnológico una amenaza y quienes ven una oportunidad.
Desde el Partido Popular creemos que se pueden y se deben conciliar los intereses de los creadores culturales y los de los internautas. Así se hizo en 2003, cuando con un gobierno popular, se pactó con todos ellos el canon vigente, como una medida transitoria y muy poco lesiva, que ahora el Gobierno de Zapatero incrementa y perpetua.
Ello es consecuencia de que, en estos cuatro años, el Gobierno Zapateril no ha hecho nada para luchar eficazmente contra la piratería cultural y en consecuencia, ha decidido que si no puede controlar o atajar la piratería, es más fácil tratarnos a todos los usuarios como piratas. ¡¡Esto si que es socialismo, “tos” café!!
Igual que fue capaz de generar tensión y división en la sociedad con lo de España es un concepto discutido y discutible, Zapatero, ahora, ha creado una polémica estéril por su incapacidad de conciliar los intereses y los derechos de unos y otros, algo que se supone es la principal obligación que tiene un gobierno que se precie. El canon no es la solución. Repercutir el coste de un delito a todos los ciudadanos no puede ser nunca la solución al problema. Un Gobierno serio debe perseguir a los delincuentes, en lugar de convertir a todos los ciudadanos en sospechosos habituales.
Zapatero, con su actitud, además de pagar los apoyos recibidos, demuestra ser incapaz de hacer cumplir la Ley, por lo que, si vuelve a ganar perpetuará este impuesto. Por el contrario, Rajoy ya ha anunciado que el canon digital es el pasado, no está adaptado al mundo que vivimos y que no tiene ningún futuro. Su compromiso es claro y firme. En cuanto sea Presidente del Gobierno lo eliminará.Para 2008, mis mejores deseos para todos.
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