unos defienden matar, otros sobrevivir

Recuerdo que hace años, en el exterior de algunos conventos y casas cunas, había una especie de torno, donde las madres que no podían o querían criar a sus hijos los depositaban para que éstos fueran dados en adopción. Hoy día, también en eso hemos cambiado. Ahora, legalmente, la madre que no quiera o no pueda criar a su futuro hijo tiene la posibilidad de, por un módico precio, simplemente eliminarlo.
No recordaré la controversia que suscitó el debate y aprobación de esa Ley. Es evidente que tiene defensores y detractores, entre los que me encuentro, pero es cierto que se aprobó por mayoría y, aunque no la comparta, hay que acatarla.
Otra cuestión es la nueva oleada de progresismo que nos llega por la detención de algunos “profesionales” que se lucran a cambio de eliminar hijos no deseados. Los colectivos más avanzados, yo diría más retrogrados, de nuestra sociedad se manifiestan y autoinculpan por la acción de la Justicia.
Mientras, en algunos países democráticos de nuestro entorno, como en Inglaterra, el debate que hay en la sociedad es reducir el tiempo máximo para permitir un aborto, bajándolo de 24 semanas hasta 20 o 22. En España, los modernos y progresistas de la izquierda proponen una ampliación de los plazos para poder acabar con la vida de un ser humano no nacido.
Me remitiré a un caso extraordinario. El de un bebé americano que con solo 21 semanas y 6 días de gestación se apresuró a nacer el pasado 24 de octubre en Miami. Pesó 280 gr. y medía 24 cm. Imagínense su tamaño, y a pesar de ello, logró sobrevivir. Hoy día ya pesa casi 2 kg. Y se llama Amilia Taylor.
No puedo pensar que cualquier mujer que decide eliminar el fruto de sus entrañas lo haga por capricho. Estoy seguro de que no será una decisión agradable ni fácil. Tampoco siento hacia ellas rechazo o desprecio. Quisiera entenderlas y creo que la administración, la sociedad, tiene que ayudarlas para que ni arrojen a sus hijos a la basura, ni acepten que un “especialista” los trocee dentro de su vientre y los extraiga con una aspiradora.