Yo también me autoinculpo

Recientemente hemos conocido que la Audiencia Nacional ha admitido la querella interpuesta contra el Presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, D. Francisco José Alcaraz, por una desconocida Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE), la cual se siente ofendida por las declaraciones que viene realizando el citado presidente de la AVT.
Todo el mundo coincidirá en que D. Francisco José Alcaraz se ha convertido en un referente de las víctimas del terrorismo, siendo uno de los que con más dureza ha criticado la actitud ambigua y complaciente de Zapatero para con los terroristas, por lo cual ha sido criticado, insultado y despreciado.
Pero ello no hace que olvidemos lo sucedido estos últimos años. Empezando por el vergonzoso pacto de José Luis –aunque le joda- Carod Rovira con ETA para que mate en el resto de España y no en Cataluña, y con el que Zapatero no duda en apoyarse, tanto en Cataluña y como en España. Como nunca nos atreveríamos a calificar a Otegui, como “un hombre de paz”, ni propiciaríamos la libertad de un asesino como De Juana Chaos, lo que si hizo Zapatero.
Ni podemos olvidar su empeño en sentarse a dialogar y negociar con los terroristas. Ni compartimos sus instrucciones a la fiscalía para que fueran sensibles a la nueva época que se abría con el mal llamado proceso de paz. Como tampoco podemos dejar pasar su empeño en influir en la judicatura en el sentido de tratar con condescendencia a los que matan, amenazan, chantajean y causan terror.
Mi postura, como la del Partido Popular ha sido clara y conocida. Siempre hemos ofrecido nuestro apoyo para acabar con los terroristas, pero no para pagar un precio político para que dejen de matar. Por eso hemos asistido a cuantas manifestaciones han convocado las víctimas, con los que además compartimos su sentimiento de haber sido traicionados y despreciados por Zapatero.
Hoy, con la admisión a trámite de la querella contra el presidente de la AVT, D. Francisco José Alcaraz, por un delito de injurias y calumnias, no puedo por menos que sumarme a la campaña de autoinculpación.
Comparto y suscribo las frases que motivan dicha querella y expreso públicamente mi desacuerdo con la querella interpuesta y con la siguiente imputación, por considerar las manifestaciones en que se basa la misma, carentes del más mínimo reproche legal y por tanto la interposición de la querella una temeridad manifiesta.
En prueba de mi solidaridad, reclamo ser convenientemente procesado junto con D. Francisco José Alcaraz en el eventual juicio que pudiera seguirse a tal efecto, toda vez que yo también comparto, ratifico, efectúo y hago mías dichas declaraciones.