Nunca en España los nacionalistas habían sido tan descaradamente separatistas como en la legislatura que acaba. Siempre fueron importantes, como debe ser, incluso se gobernó con su apoyo, pero nunca se les había permitido ir tan lejos.
Pero Zapatero asumió muchas tesis nacionalistas y obligó a éstos a radicalizar sus pretensiones. La mayoría de ustedes coincidirá conmigo en que nunca Cataluña ha estado tan alejada de la realidad nacional que es España. Y eso que aún no se han resuelto los recursos de inconstitucionalidad del Estatut.
Del País Vasco podríamos decir otro tanto. Jamás los nacionalistas vascos habían anunciado la fecha de un referéndum de autodeterminación. Ya lo intentaron hace años, pero entonces socialistas y populares, en esta cuestión, iban de la mano y, ante la firmeza de ambos, aparcaron sus intenciones. Ahora, con los cambios de convicciones de los socialistas, el PNV vuelve a ello con mucha más fuerza.
En Galicia van por el mismo camino. Inmersión lingüística y persecución de los castellano parlantes. Lo que llaman galleguización. Están siguiendo los mismos pasos que catalanes y vascos. Primero siembran las diferencias, luego alimentan el odio y posteriormente recogerán sus frutos. Al menos si enfrente hay un gobierno débil que no sabe defender lo que viene siendo España desde hace siglos.
Lo ocurrido estos días con Kosovo no tiene nada que ver con la situación que tenemos en España. Incluso socialistas y populares han coincidido en rechazar la decisión unilateral de Kosovo de independizarse de Serbia. Pero hay que ser realistas, los nacionalistas y separatistas han visto un precedente favorable a sus pretensiones que utilizarán a poco que se les permita.
El próximo 9 de marzo también hay que elegir un presidente que, como Zapatero, con tal de gobernar es capaz de ceder lo que haga falta, incluso la unidad de España, o un presidente que, respetando la representación de los nacionalistas, no les conceda más valor del que realmente tienen y no esté dispuesto a transigir más allá de lo razonable. Ese es Mariano Rajoy.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario