El pesebre.

Zapatero ha dado una nueva vuelta de tuerca y ha vuelto a revisar las previsiones económicas de su desgobierno para este ejercicio. Los españoles ya sabemos, por boca del vicepresidente económico, ese que en vez de hablar solo encoge los hombros como si él no tuviera nada que ver, que en 2009 nuestro Producto Interior Bruto no solo no crecerá, sino que se reducirá un 1,6%. Eso sí, como el optimismo es lo que vende, para 2010 crecerá hasta el 1,2 y en 2011 podría llegar al 2,6. Admitiendo además que en el último trimestre el pasado año, nuestra economía nacional ha entrado en recesión por primera vez desde 1993. ¡¡Menudo logro Zapatero!!
Las cifras de paro, alcanzarán un porcentaje en torno al 16% en este año, bajando un par de décimas en 2010 y pudiendo seguir bajando incluso al 15% en 2011. Incluso ya empezamos a oír hablar de cuatro millones de parados. ¡¡Y eso que hace pocas fechas Zapatero pronosticaba conseguir el pleno empleo!!
Por lo que respecta a las cuentas del Estado, los datos indican que 2008 podría registrar un déficit de casi tres puntos y medio del PIB, mientras que las últimas previsiones dadas a conocer por el gobierno Zapateril son de un déficit en torno a 6 puntos para 2009, casi de cinco puntos para 2010 y de cuatro puntos para 2011. Es decir, Zapatero seguirá gastando lo que no tenemos durante los próximos años.
Estas cifras no han sorprendido a casi nadie. Es algo que todo el mundo veía venir, menos Zapatero, que había presupuestado y previsto, no hace seis meses, números muy diferentes e irreales para la situación de nuestra economía.
Y mientras los datos económicos empeoran, ¿Dónde están los sindicatos?. Muy fácil, contando subvenciones, exprimiendo cursos de formación, ampliando su influencia con más y más liberados sindicales, rentabilizando sus gabinetes jurídicos, haciendo propaganda y reuniéndose, siempre están reuniéndose, pero apenas se les oye o se les ve en la calle, salvo para aplaudir al gobierno o frenar a los trabajadores que dicen representar, los cuales empobrecen a la vez que ellos enmudecen.
Porque todo esto tiene premio, en Albacete, por ejemplo, han conseguido suelo gratis para construir viviendas, obteniendo pingues beneficios, además han conseguido suelo público para construir sus nuevas sedes, y de paso, hasta el mismo consistorio socialista ha financiado la celebración de un congreso provincial de uno de esos sindicatos de clase. Eso sí, a costa del contribuyente, milite o no en ese sindicato.
Por eso muchos nos preguntamos que, en las misma situación económica, si gobernara el PP ¿que harían estos sindicatos de clase?. Seguramente estarían todo el día con la pancarta en la calle y no solo para protestar contra lo que sucede en Gaza.
Y es que se han convertido en un apéndice más de Zapatero. Eso sí, a sueldo.