Lo que haga falta

Hoy se resolverá el misterio. La Fiscalía contestará al Juez Estrella sobre si tiene que dejar el sumario del caso Gurtel. Aunque a estas horas, da igual. El objetivo que se pretendía de perjudicar las expectativas electorales del PP, poco o mucho, se ha logrado. La oposición popular ha quedado en entredicho, aunque aún no hay acusados formalmente, y dudo mucho que haya alguna condena. Al final todo quedará en agua de borrajas. Y es que, me huele que todo ha sido un invento premeditado y alevoso.
Son las formas de un gobierno, el de Zapatero, que es capaz de hacer lo que haga falta. Es consustancial con su ideología. Trepar como sea hasta el poder y una vez conseguido, mantenerlo a costa de lo que sea. Incluso utilizando y manipulando cualquier poder del Estado. Esto es a algunos jueces, fiscales y policías, prestos a dorarles la píldora, a cambio de notoriedad, ascensos y sobresueldos.
La consecuencia es que la sociedad española cada vez desconfía más de su sistema jurídico. No se fía ni de los jueces, ni de los fiscales, ni de la policía. Por lo que el daño ocasionando costará mucho superarlo. Y eso que estoy convencido de que la mayoría de éstos son personas honradas y honestas, que actúan con imparcialidad.
En este caso, donde a pesar del secreto de sumario, diariamente determinado medio de comunicación afín a Zapatero, publica las supuestas actuaciones que se siguen, creando una indefensión absoluta para los que puedan ser acusados. Donde el juez, la fiscal y el comisario que lleva la búsqueda de pruebas, se echan al monte de la mano del ministro del ramo, todo huele a Mortadelo. Aunque la realidad es la que es. Hasta ahora, el Juez Estrella ha imputado a 18 personas, de las cuales solo 3 mantiene en prisión. Las otras 15 las ha puesto en libertad sin ninguna medida cautelar. Eso sí, tras varios días a la sombra esperando que volviera de sus cacerías.
De los supuestamente aforados del sumario, nada se sabe, salvo las filtraciones que, los acólitos de Zapatero, interesadamente han publicado en plena campaña electoral vasca y gallega. Los afectados se han enterado por la prensa, sin saber hasta ahora de que se les acusa, si es que se les acusa. Pero lo importante era poner el ventilador y distraer a la opinión pública de lo principal, el caos y el drama económico en que nos ha sumido la incompetencia zapateril, y eso lo han conseguido.
Zapatero hasta ha sacrificado al peor Ministro de Justicia de la democracia, en cuyo haber hay que anotar, no haber conseguido modernizar su departamento, romper el consenso con la oposición, cabrear y movilizar a todo su personal, desde los funcionarios, secretarios judiciales y jueces, consiguiendo pasar a la historia por ser el primer ministro al que le hacen una huelga estos últimos.
Y Zapatero, de rositas, como si él no tuviera nada que ver.