JetaP.

Hay que dar gracias a Dios por tener un presidente como Zapatero. Los españoles estamos en deuda permanente con él. Nadie como él nos entiende, ni nadie como él se preocupa por nuestro bienestar y progreso. Quién es capaz de sacrificar sus principios y aumentarnos los impuestos del tabaco solo para preservar nuestra salud. O quién se atreve a subir los impuestos sobre los hidrocarburos para proteger el medio ambiente. Solo un ser planetario como Zapatero se presta a ser incomprendido por las masas retrogradas y antipatriotas. Pero en el fondo, más del 120% de sus conciudadanos le aplauden y le respaldan. Por eso está ahí. Al frente de nuestra nación de naciones.
A pesar de lo que digan los de siempre, los que se oponen al progreso y a los avances sociales, Zapatero no ha subido los impuestos, al contrario los ha bajado más que nadie. No es cierto que las tasas hayan subido entre un 2% y un 7%, a pesar de tener un IPC negativo, y quien diga lo contrario es un manipulador.
Ni tampoco es cierto que, teniendo en cuenta dicho IPC negativo, al no actualizar el IRPF mínimo personal y familiar, ello supone que dicho impuesto aumenta. Como no llevan razón los que aseguran que Zapatero ha suprimido las deducciones a PYMES, para la exportación, inversión en I+D, y otros. Menos aún que vaya a reducir las ayudas por la compra de la primera vivienda. Todo eso son habladurías malintencionadas de los que discrepan con su magnífica política económica. Ya quisieran ser tan listos como él. Hay algunos que incluso aventuran que próximamente Zapatero obligará a subir las tarifas de la luz y el teléfono, y por supuesto de los impuestos que se le aplican.
Lo que sí es cierto es que, gracias a Zapatero, nuestro país-estado pacifista, ecologista, democrático, puede presumir de ser el primero del mundo mundial en derechos sociales, léase aborto a la carta, matrimonios homosexuales, eutanasia, etc. Y aspiramos a poder encausar a cualquier ser humano que se pase de la raya, esté vivo o muerto, sea español o extranjero, resida en nuestro territorio o fuera del él. La acción de la justicia interplanetaria no podrá eludirla. ¿Verdad Garzón?
Pero los enemigos de nuestro paraíso social y de derechos no descansan, y se empeñan en propagar falacias como que se están hundiendo los ingresos del Estado, motivado por la pérdida masiva de empleo (ya supera el 17% y se prevé llegue al 20%); por el bajo crecimiento del salario medio; la caída del consumo (el IVA de las PIMES cae un 18% y un 14% el de las grandes empresas); el desplome de los beneficios empresariales (el Impuesto de Sociedades cae un 28%); la bajada de ingresos por intereses, dividendos y arrendamientos, etc. Y sin pasta, ¿Cómo mantener el kiosco?
Los que dicen que esto no funciona son unos mentirosos y pesimistas que nos quieren asustar. Menos mal que está Zapatero para salvarnos. Dios nos pille confesados.

1 comentario:

Aeronata dijo...

Indudable.

Es indudable que la crisis económica no es culpa de ZP; si bien igualmente indudable es la pésima gestión que de ella está haciendo el gobierno.

Es indudable que la crisis económica se está cebando de manera especial con España, que el modelo económico parece agotado y antiguo y que una renovación empieza a ser absolutamente necesaria; si bien es igualmente indudable que este gobierno no parece capaz de liderar esa renovación.

Es indudable que la cosa está muy malita, que tenemos paro p'aburrir, que nos estamos gastando lo que no tenemos, que cada vez ingresamos menos y se nos está poniendo cara de nuevo rico venido a menos; si bien es igualmente indudable que, ZP, en su huida hacia adelante, va a seguir despilfarrando el dinero del contribuyente, con financiaciones autonómicas, financiación de todo tipo de proyectos con el único requisito de que haya un cartelón del "Plan-E" a la entrada y toda la batería de medidas "anti-crisis" de resultado más que cuestinable.

Lo peor de todo es que, una vez más, quien va a pagar todo esto, vamos a ser nosotros, los españoles. Y eso es, desafortunadamente, indudable.