Contra corriente.

Eso es lo que está haciendo Zparo para combatir la crisis. Justo lo contrario de lo que hay que hacer. En vez de apretarse el cinturón y ser riguroso en el gasto, opta por gastar más y en temas superfluos e innecesarios. Como el dinero público no es de nadie, decía una de sus ministras estrella. O al menos eso es lo que se desprende de las cuentas que ha presentado para el próximo ejercicio 2010.
Según los datos que se van conociendo, Zparo pretende malgastar seis mil euros diarios en comidas, cenas y regalos. Sin contar los 33,6 millones de euros que quiere utilizar para gratificaciones de su personal de confianza. Y es que hay que resaltar que, desde que llegó a La Moncloa, Zparo ha duplicado los gastos de personal, llegando a contabilizarse hasta 640 asesores y colaboradores a su servicio. Debe ser que, como cuando acude a un acto público es abucheado y silbado, necesita una corte de aduladores que le curen esos malos tragos, y hay que recompensarlos con generosidad.
Como todo es poco para atender a este personal tan fiel, se propone aumentar la partida correspondiente casi un cinco por ciento más que en 2009, o lo que es lo mismo, un incremento de casi treinta millones de euros para 2010. Paralelamente, el incremento que se propone en la partida de incentivos para este personal, asciende a cinco millones de euros. ¡¡A ver quien es el guapo que no aplaude y vitorea al Presidente!!
Pero no queda aquí la cosa, ya que si hablamos del coste presupuestado para que España asuma la Presidencia de la Unión Europea, nos enteramos de que Zparo quiere gastar hasta un 50% más de que lo que gastó Aznar en 2002 para lo mismo. Comparativamente, Zparo, en tiempos de crisis malgastará 159.000 euros más al día. ¡¡Cara Presidencia nos va a salir!! Claro, los acontecimientos planetarios tienen estas cosas.
Mientras Zparo malgasta a manos llenas nuestro dinero, endeudándonos hasta cifras increíbles -solo en 2010 se emitirá deuda por 211.500 millones de euros más-, las familias españolas se aprietan el cinturón y consiguen ahorrar uno de cada cuatro euros.