Cuatro años ha tardado el Tribunal Constitucional en parir la sentencia sobre el Estatuto de Cataluña. Ya era hora. Si cualquier trabajador tardara tanto en hacer su trabajo, lo pondrían de patitas en la calle. Es lo que deberían haber echo con los miembros del Tribunal, en vez de aguantar su incompetencia y desidia en un asunto de capital importancia para nuestro futuro. Y aún falta por resolver varios recursos más sobre el mismo asunto.
El espectáculo bochornoso y de desprestigio al que han sometido a esa institución es difícilmente recuperable. Y es que la justicia camina por unos derroteros peligrosos al dejarse influir cada día más por el poder político. Cuando Alfonso Guerra aseguró que Monstesquieu había muerto, no iba descaminado. Los socialistas están acabando con la separación de poderes. El poder judicial cada día más es la continuidad del poder político. Y eso traerá consecuencias.
Con todo, se ha dictado sentencia y ocurre algo que nadie entiende. A los socialistas de Zparo les satisface plenamente. Según ellos, les da la razón. Por el contrario, a sus hermanos socialistas catalanes les disgusta profundamente. Según éstos, con el charnego Montilla a la cabeza, va totalmente contra sus intereses. A mi no me sorprende, porque los socialistas son capaces de decir sí, no y lo contrario a cualquier cuestión que se plantee.
Lo cierto de todo es que el Constitucional, a pesar de su politización, modifica 15 artículos del texto y cuestiona otros 35. Sin contar con que, según la sentencia, el término nación incluido en el preámbulo no tiene ninguna eficacia jurídica, o lo que es lo mismo, solo es un adorno literario, por lo que se deduce, como no podía ser de otra manera y pese a quien pese, que nación solo hay una, España.A pesar de ello, la sentencia, a mi juicio, es demasiado benévola y va contra la unidad nacional, lo que ha motivado y motivará que el resto de comunidades también quieran tirar de su lado de la manta. Al final, si alguien no para este desmadre, la manta que compartimos se hará jirones. Y los sociatas tan contentos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario