Vuelta a empezar.

Finalizado agosto y con él las vacaciones de la mayoría de los que se lo pueden permitir, llega el regreso al día a día, encontrándonos de sopetón y antes de encarar nuestra feria, con el debate del Estado de la Región, convocado por Barreda para evitar. en la medida de lo posible, que su fracasada gestión trascienda al castellano manchego de a pie.
Además, Barreda es el hombre de Zapatero en nuestra región, su representante, al que avala y defiende, por lo tanto, es co responsable de la penosa situación en que nos encontramos. Estuvo a favor de la subida del IVA, de la congelación de las pensiones, de la rebaja en el sueldo de los empleados públicos, o en contra de reducir los impuestos. Es más, ordenó a sus diputados y senadores apoyar la derogación del Plan Hidrológico Nacional que tanto nos beneficiaba, respaldar el inconstitucional Estatuto de Cataluña que tanto nos perjudicaba, al igual que hizo con la Ley contra el Vino, básico para nuestro desarrollo, además de votar a favor de la nueva Ley del Aborto, luz verde para asesinar impunemente a seres indefensos.
Son solo algunos ejemplos de su política, aunque los disimule con grandes anuncios, palabras grandilocuentes o miles de euros de dinero público malgastado en su autopromoción y propaganda. Hacer algo beneficioso para los castellano manchegos no sabe, pero vender las bondades del barquero con dinero de nuestros bolsillos, eso se le da mejor que bien.
Un Barreda, capaz de prometer el pleno empleo en el debate de su investidura y que ve que tenemos un 22% de paro, es decir más de 210.000 castellano manchegos que quieren trabajar y no encuentran donde, debería empezar a pensar en, como dicen los rumores, dejar paso a otros que puedan remediar sus errores.Cómo es posible que no le de vergüenza que un sindicato hermano como UGT afirme que en nuestra región hay más de 250.000 personas, de ellas 60.000 son extranjeras, trabajando y sin dar de alta en Seguridad Social. Claro que siendo Barreda el cómplice activo del mayor recorte de derechos sociales conocido, qué podemos esperar de él.