Colores.

Desde el 22 de mayo pasado ha empezado una nueva era en España. Basta con echar un vistazo al mapa político para darse cuenta. Casi todo él está pintado de azul. El rojo casi ha desaparecido. Solo quedan dos reductos, País Vasco, donde los socialistas gobiernan gracias al apoyo desinteresado del PP, cuyo único objetivo es impedir el paso a los terroristas y sus socios nacional-separatistas. Y Andalucía, con una descomposición política anticipo de su debacle en las próximas elecciones autonómicas.
El resto de España, salvo sorpresas de última hora en Extremadura o Asturias, será casi todo del PP. Quedarán Cataluña y quizás Canarias, pero una cosa está clara, donde venían gobernando los populares, estos han reforzado su respaldo y donde gobernaban los socialistas, estos han sido desalojados. Más de 12 millones de españoles se han sumado a los que ya rechazaban las políticas socialistas. O lo que es lo mismo, los socialistas han pasado de gobernar a 22 millones de españoles a nivel autonómico, a hacerlo a solo 10, si incluimos Andalucía, donde no se han celebrado comicios autonómicos.
En realidad los ciudadanos no han castigado a los socialistas por la crisis, los han castigado por cómo han gestionado la crisis. Esta es la diferencia entre un gobierno serio, riguroso, y transparente, y otro que no sabe a donde va, dedicado solo a despilfarrar recursos públicos. El ejemplo más cercano lo tenemos en nuestra región. Contra una política suicida de endeudamiento y gasto sin control, Cospedal ha anunciado desde el principio un drástico recorte de cargos públicos y personal de confianza en su administración. Así es como hay que actuar, dando ejemplo.
Cospedal sí ha escuchado a la gente, sabe que lo que están pidiendo, exigiendo, son medidas ejemplares de ahorro en las administraciones, una decidida e incansable lucha contra el desempleo, la tan ansiada regeneración democrática y avanzar sin pausa hacia la superación de la crisis económica y social en que nos han sumido los socialistas.
Ella ha recogido esos deseos y se ha comprometido con ellos.